Conoce los 10 productos más difíciles de reciclar, los impactos que estos generan en la naturaleza y cómo podemos minimizar sus consecuencias devastadoras:
- Bolsas de plástico: Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), diariamente en el mundo se utilizan alrededor de 500 mil millones de bolsas de plástico, las cuales generan un enorme impacto ambiental causando cada año la muerte de 1 millón de aves y 100.000 animales marinos. Los países del mundo han implementado estrategias para la reducción del uso de las bolsas plásticas, como lo son el cobro de estas, su fabricación con al menos el 50 % de materiales biodegradables y el uso de bolsas amigables con el medio ambiente y reutilizables.
- Pañales, toallas y tampones: La Organización de Consumidores y Usuarios de España (OCU) expone que un bebé puede utilizar en sus dos primeros años de vida hasta 6.000 pañales deséchales y una mujer en su vida fértil puede utilizar hasta 13.000 toallas y tampones. El uso masivo de estos productos, diversificación y composición mayormente a base de algodón y plástico, hacen que sean contaminantes, difíciles de reciclar y que comprendan un alto riesgo biológico. Para reducir el que impacto negativo que estos productos causan en el medio ambiente puedes reemplazar los pañales desechables por aquellos de tela o biodegradables, y cambiar las tollas y tampones, por la copa menstrual reutilizable.
- Cápsulas de café: La cápsula de café es un contenedor de plástico hecho a la medida, que contiene café molido y es procesada por una máquina especial para hacer café a la medida de una taza. Este producto a pesar de ser cada vez más utilizado, es uno de los más complejos de reciclar debido a la dificultad de separar el café del contenedor. Han surgido diversas iniciativas del sector privado y pequeñas empresas que reutilizan las capsulas de café para el desarrollo de mobiliario y decoración. Además, se están implementando puntos de reciclaje de las cápsulas, con el fin de recoger estos productos e implementar mecanismos de reutilización.
- Tetrabricks: Los Tetrabricks son envases utilizados generalmente para almacenar alimentos líquidos y refrigerados, construidos a base de cartón, plástico polietileno y aluminio, mezcla de materiales que por su procesamiento se hacen de difícil separación y reciclaje. Aunque muchos de los alimentos consumidos diariamente son envasados en Tetrabricks, se sugiere al consumidor buscar alternativas que sean amigables con el medio ambiente, de fácil reciclaje o biodegradables.
- Bombillas: Debido a la diversidad de tecnologías en las bombillas cada una de estas se recicla de una forma diferente (fluorescentes o LEDS) y algunas ni siquiera pueden reciclarse (halógenas y las incandescentes), lo que hace que el proceso para el reciclaje de estos productos sean uno de los más complejos, difíciles y costosos. Debido a esta problemática, algunos países del mundo están promulgando leyes que des[1]continúan las bombillas halógenas y las incandescentes, prohibiendo su fabricación. De manera adicional y como mecanismo para el tratamiento de estos desechos, se invita a las personas a llevar las bombillas que ya no sirven a un punto limpio que las agrupe, clasifique, recicle y deseche de manera adecuada. También existe la iniciativa de empresas de decoración que están creando lámparas, jarrones, portarretratos y demás piezas a base estos materiales.
- Aceite: El aceite ocasiona taponamientos en tuberías y ductos subterráneos, debido a que la grasa que contiene se solidifica y adhiere a las paredes de la tubería, bloqueando el flujo del agua residual y ocasionando desbordamientos. Además de que según la Fundación Aquae, un litro de aceite usado contamina 1.000 litros de agua y al llegar a los ríos y mares, en la superficie el aceite genera película que afecta la vida de los seres que habitan estos ecosistemas. La alternativa más viable para el tratamiento adecuado del aceite son la implementación de contenedores urbanos como puntos limpios para la recolección y tratamiento de estos residuos.
- Medicamentos: Se ha evidenciado que los medicamentos al igual que el aceite se duchan por los desagües ocasionando taponamientos en las tuberías, la contaminación de los ríos y mares, así como la afectación de los ecosistemas que allí viven. Por tanto, para su adecuado tratamiento se deben llevar los medicamentos vencidos a la farmacia o punto limpio más cercano.
- Chicles: El proceso de biodegradación de este producto es muy complejo, debido a que tarda varios años en desintegrarse por completo al estar fabricado a base de goma y, por lo tanto, el chicle no se recicla. Las iniciativas para contrarrestar el efecto ambiental de este producto van desde la de reciclar y reutilizar este material con contenedores hechos precisamente de chicle, hasta procesarlos para convertirlo en suelas de zapatos.
- Juguetes: Los juguetes fabricados hoy en día están construidos con diferentes materiales que hacen difícil su separación, clasificación, reciclaje y reutilización. La manera más eficiente para reutilizar estos productos que se acumulan en ocasiones de manera no controlada, es donar o regalar aquellos que se encuentren en buen estado. Si se desea que estos juguetes sean reciclados, se deben llevar a un punto limpio que se encargue de su recolección y posterior separación.
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Discos y vinilos: Aunque los discos y vinilos están hechos en un 98% de plástico, estos contienen sustancias químicas muy perjudiciales para el medio ambiente, lo que hace que su proceso de reciclaje sea complejo. Al igual que los juguetes, estos productos pueden donarse o regalarse. También pueden ser utilizados de manera creativa como insumo para piezas de decoración, mobiliarios y luminarias. También pueden ser llevados a un punto limpio que se encargue de su recolección, reciclaje y reutilización.
Nota inspirada en la fuente:
www.nationalgeographic.es https://www.nationalgeographic.es/medio-ambiente/2018/08/sabes-cuales-son-los-10-productos-mas-diciles-de-reciclar
